¡Yo soy lo que pienso!

¡La prosperidad del universo viene a mi sin esfuerzo porque soy para él y me lo merezco!

¡Soy parte de Dios por eso todos me tratan con respeto, admiración y amor!

¡Yo soy lo que pienso, así que elijo pensar en abundancia, prósperidad, cordialidad, amistad, armonía y felicidad!